Una boda llena de magia en Zaragoza

¡Hola!

Hoy quiero contarte una historia mágica y deliciosa que viví hace poco.

Resulta que Patricia, una novia encantadora, se puso en contacto conmigo desde Madrid para que le ayudara con algo realmente especial para su boda en el Restaurante Cachirulo, en Zaragoza.

¡Y no te imaginas lo emocionante y divertido que fue todo!

Todo empezó cuando Patricia estaba buscando ideas originales para su boda. Sabía que quería algo diferente, algo que sorprendiera a sus invitados y que dejara un recuerdo imborrable en sus corazones. Así que, navegando en Google, dió con mi tienda de Candy Bar a la Carta, y me llamó emocionada por teléfono.

Después de unas risas y charlas como si fuéramos amigas de toda la vida, Patricia me contó su sueño para la boda: quería tener un Candy Bar inspirado en el mundo mágico de «Harry Potter». Como soy fans incondicional de la saga, ¡sabía que íbamos a llevar a cabo algo extraordinario!

Juntas, comenzamos a planificar los detalles del Candy Bar.

Patricia me dijo que la boda tendría unos 120 invitados, así que necesitaríamos suficientes chuches y golosinas para todos. Además, le recomendé incluir algunos elementos temáticos de «Harry Potter» para darle ese toque mágico que buscaba.

Preparé un par de manualidades que sí te animas hacerlas las tienes en instagram 

Un caldero y las tapas de un libro

Elegimos con esmero 15 kilos de chuches y galletas que incluían donetes, chocolates, galletas, nubes, frutos secos, regaliz, sandías, platanitos y chicles.

La mesa de dulces se vería simplemente espectacular con toda esa variedad.

¡Definitivamente, iba a ser un deleite para los sentidos de todos los asistentes!

Además de la selección de golosinas, Patricia también quería que el candy bar luciera encantador y bien decorado. Así que le ofrecí una amplia gama de atrezzos y elementos de montaje que dejarían a todos boquiabiertos. Y, como no podía ser de otra manera, añadimos algunos detalles inspirados en «Harry Potter», como varitas mágicas, escobas de quidditch y mini-calderos llenos de caramelos.

Una de las ventajas de mi servicio de Candy Bar a la Carta es que los clientes pueden personalizar completamente su mesa de dulces. Y Patricia no dejó escapar esa oportunidad. Ella tenía una visión clara de cómo quería que su boda fuera, y el Candy Bar era una parte fundamental de esa visión.

El día de la boda finalmente llegó, y fue simplemente mágico. El Restaurante Cachirulo en Zaragoza era un lugar encantador, y con la decoración temática del Candy Bar, parecía sacado directamente de la Escuela de Magia y Hechicería de Hogwarts.

La ceremonia fue hermosa, original y emotiva. Los novios irradiaban felicidad, y los invitados se mostraban encantados con cada detalle. Pero lo mejor estaba por venir: ¡el Candy Bar de «Harry Potter»!

Cuando los invitados descubrieron la mesa de dulces, sus rostros se iluminaron con una sonrisa de asombro. La combinación de colores y sabores era simplemente irresistible. Patricia y yo sabíamos que habíamos logrado crear algo realmente especial.

La boda fue un éxito rotundo. La música en vivo y el fotomatón añadieron un toque de diversión y alegría a la celebración.

¡Todos se lo pasaron en grande!

Lo mejor de todo fue recibir los comentarios de los invitados, que no paraban de elogiar el Candy Bar y su temática única.

Ver la felicidad en el rostro de Patricia mientras disfrutaba del día más importante de su vida fue una recompensa inigualable.

Al final de la jornada, cuando llegó el momento de desmontar el Candy Bar, me sentí un poco nostálgica. Pero al mismo tiempo, sabía que habíamos creado un recuerdo mágico que Patricia atesoraría para siempre.

Esta fue la historia del Candy Bar a la Carta que Patricia y yo creamos juntas para su boda.

Una experiencia única y llena de dulzura que jamás olvidaremos. Si tienes algún evento especial en el futuro, ¡no dudes en contactarme para crear algo igualmente asombroso y personalizado!

¡Hasta la próxima aventura mágica!